Con la llegada del verano las varices empeoran, comenzando a aparecer sintomas en las piernas.
El calor tiene un efecto vasodilatador sobre las venas que provoca un aumento de molestias tales como: pesadez, cansancio, calambres, hormigueos e hinchazón. Esto provoca que el verano sea para las personas que padecen problemas circulatorios un verdadero suplicio.
Por ello, el Centro Terra de Flebologia y estetica medica y el Servicio de Flebologia del Hospital Español, aconseja a sus pacientes cómo aprovechar el verano y conseguir extraerle lo mejor, pudiendo conseguir una correcta salud vascular en esta estación, evitando así el sufrimiento de las piernas.
Algunos de sus consejos son los siguientes:
– Alimentación: comer fibras y tomar abundante agua nos ayuda a eliminar toxinas y grasas que obstaculizan el fluido de la sangre.
– Lo más importante es no exponer las piernas al sol o a cualquier otro foco de calor durante tiempos prolongados; en caso de exponerse es recomendable el uso de protectores o pantalla solar.
– Se recomienda no permanecer de pie o sentada con las piernas bajas por tiempos prolongados.
– Los días más calurosos del verano, lo mejor es darse una ducha de agua fría. Las duchas de agua fría son excelentes para activar la circulación.
– Hacer un masaje de varios minutos un par de veces al día con gel flebotonico o con aloe vera (guardado previamente en la heladera para que este frío), del pie, pasando por la pantorrilla hasta el muslo.
– Si proyecta realizar un viaje, en caso de ser de muchas horas y padece de varices, es recomendable una consulta previa con el especialista. De todas formas es aconsejable, durante el viaje detener la marcha del vehiculo o pararse en caso de viajar en avion y realizar algunas caminatas cortas cada dos o tres horas y/o pararse en puntas de pie. Igual ejercicio puede realizarse flexinoando el pie hacia arriba para contraer el gemelo, esto es muy importante ya que moviliza la sangre de las piernas y evita la posibilidad de generar una trombosis, que puedan complicar las vacaciones.
– Aprovechar los días de playa y pasear por la orilla del mar con los pies en el agua, o en la arena humeda, esto genera un masaje excelente y favorece el retorno venoso .
– Descansar elevando las piernas, aprovechando el momento de estar estirado en la cama o reposera, para realizar ejercicios con las piernas alzadas, como una “bicicleta invertida».
Dr Daniel Rubio
Servicio de Flebologia
Hospital Español de Mendoza